Me enamoré de ti,un día de primavera,
era todo bello y lindo,
en noches de luna llena,
me sentí amarrada a ti,
desde aquel primer momento
que me miraste a los ojos,
con amor y sentimientos.
Tu mirada era mi universo
tus labios mi mundo de besos,
tus brazos mis cadenas
encadenada a tu cuerpo,
la gran felicidad,
encadenados en nuestro lecho.
Fuiste una gran realidad
en mi vida y mi destino,
pero marchaste tan pronto
a veces aquel amor infinito,
pienso fue un dulce sueño.
Pero soñado no fue
porque siempre estábamos unidos
con amor y felicidad,
salíamos de paseo y me llevabas a cenar,
después me cogias por la cintura
y nos íbamos a bailar.
Danzábamos bellas melodías
románticas y candenciosas,
de amores apasionados
en tus brazos yo bailé,
como una mariposa.
Pero aquellos tiempos felices
poquito tiempo duraron,
y marchaste de mi vida,
sin nosotros desearlo.
Pero el gran Dios que tan poderoso es
te arrancó de mi vera,
tú mi gran amor, mi universo,
mi lucero, el que iluminaba mi vida
con Él te llevó.
A mi me dejó muy sola
hace tanto tiempo ya,
pero te recuerdo siempre
marchaste en plena juventud,
cuando todo en nuestra vida eran sueños
y con tu partida así, dejé de soñar.
Hoy eres mi GHOST
pero no eres fantasma,
sigues viviendo en mí
cuando yo marche a tu lado,
volveré hacerte feliz.
Rosario Ayllón.
Poetisa del Amor.
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